La asociación de Moros y Cristianos de Alzira ha obtenido un gran reconocimiento a su trabajo en la introducción y consolidación de esta fiesta en una ciudad tan fallera como la capital de la Ribera Alta.
La Unión Nacional de Entidades Festeras ha aprobado su admisión en esta Federación que únicamente engloba a 68 de las 220 localidades de todo el país que organizan fiestas de Moros y Cristianos. De hecho en la Ribera sólo Villanueva de Castellón y la Pobla Llarga estaban hasta ahora admitidas entre
16 poblaciones. La UNDEF sólo permite la entrada a poblaciones que celebran sus fiestas durante al menos tres días –la llamada trilogía festera-, dedican la fiesta a una santidad (en Alzira Santa Catalina, “que mató a su padre moro, con un cuchillo de oro”) y realizan una embajada. Cada primer fin de semana de octubre, Alzira recuerda la toma pacífica de Al-Yasirat por parte de Jaime I, en las murallas que tienen mil años de historia de la plaça del Mercat.
En la asamblea de la UNDEF también se aprobó la entrada de Moraira y Ròtova
En la asamblea de la UNDEF también se aprobó la entrada de Moraira y Ròtova
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