- Una pareja lesbiana gana el juicio por el cobro de la ayuda por hijos menores.
- Hacienda rechazó la deducción y obligó a retornar la subvención, pero el tribunal ha reconocido su derecho
Con Hacienda y, más concretamente, con una
funcionaria se toparon Araceli y Juani, un matrimonio con dos hijos al que la
directora de la Agencia Tributaria en Alzira les negó la ayuda por hijos
menores por ser lesbianas. El Tribunal Económico y Administrativo les ha dado
la razón tras un largo proceso, reconociendo el derecho a percibir la ayuda,
como cualquier otra familia. Más de tres años, perjuicios económicos y morales
ahora restablecidos.
El proceso comenzó en 2012 cuando Juana T. Rodríguez realizó
la declaración de la renta y solicitó la ayuda para hijos menores de 3 años. La
pareja tiene dos hijos gemelos y no había solicitado la prestación, al
desconocer su existencia. Les llegó aprobada y percibieron la subvención en un
solo pago de 2.400 euros (1.200 por cada hijo), en vez de los 100 euros
mensuales, la otra opción de cobro.
Pero la tramitación de la declaración de la renta llegó a
las manos de la entonces directora de la oficina de Hacienda en Alzira, donde
residen las afectadas, que les denegó la deducción de la subvención y la
Agencia Tributaria les reclamó el retorno de la ayuda con recargo, 3.930 euros,
ya que la pareja solicitó un aplazamiento ante la imposibilidad de devolverlo
en un solo pago.
Juani y Araceli se entrevistaron con la funcionaria para
reclamar una explicación a la denegación y la directora «nos dijo que como
había un vacío legal, ella no iba a permitir que cobráramos la ayuda porque eso
era discriminatorio contra las parejas heterosexuales», explica Araceli Picó,
que manifiesta que «lo discriminatorio es que tuviéramos que casarnos un poco
obligadas para que nuestros hijos tuvieran reconocidos sus derechos, e incluso
que tuviéramos que inscribirlos antes de nacer, por ser un matrimonio formado
por dos mujeres. Eso sí es discriminatorio», denuncia Araceli.
La oposición de la directora de Hacienda fue
«amedrentadora», señala Juani, ya que «nos dijo que en la siguiente
declaración, si volvíamos a pedir la deducción de la ayuda nos la volvería a
denegar». Araceli lamenta que «la ideología conservadora de esta mujer se
interpusiera y negara el derecho de nuestros hijos a percibir la ayuda. Es
indignante y reprobable a nivel moral que aún haya gente así».
Los impedimentos no se quedaron en la funcionaria, y Araceli
y Juani se encontraron con que en la asociación LGTB (lesbianas, gays,
transexual y bisexual) de Valencia les recomendaron «no hacer revuelo para no
perjudicar a otras parejas», señalan. Pero entonces se cruzó en su camino la abogada
de Xàtiva Cristina Suñer, quien decidió llevarles el caso, y Catalina Pallàs,
natural de Manuel, e integrante de LGTB Catalunya. «El respaldo de Cristina y
de Cati nos animaron a seguir adelante porque por fin había alguien que nos
abría la puerta a que nuestro derecho fuera reconocido».
Suñer explica que interpusieron recursos ante Hacienda, que
«denegaba la deducción alegando que no tenía derecho a percibir la ayuda al no
ser la madre biológica». La declaración de la renta la hizo Juani, la única que
trabajaba en ese momento. Suñer expone que «alegamos contra la liquidación de
Hacienda», pero la Agencia Tributaria desestimó el recurso y obligó a retornar
la ayuda. Además, Hacienda bloqueó la declaración de Juani y paralizó las
retenciones brutas de trabajo que le correspondían, que finalmente no le han
retornado.
Términos jurídicos
La pareja recurrió entonces al Tribunal Económico y
Administrativo que finalmente ha fallado a favor de la pareja, resolviendo que
el concepto de madre biológica «no es un concepto jurídico y ni en el IRPF, ni
en el reglamento se alude a este concepto», remarca la abogada de Xàtiva.
Cristina Suñer detalla que «jurídicamente el término de madre biológica no
existe. La ley habla de mujer, madre y trabajadora y las tres condiciones las
cumplía Juani».
El caso de Araceli y Juani es el primero que se resuelve en
Xàtiva, ya que afirman que no había precedentes de procesos similares. Araceli
y Juani han decidido explicar su caso «para que otras parejas que se encuentren
en la situación que hemos sufrido nosotras sepan que la ley les ampara y que
tienen nuestra ayuda». «Nosotras estuvimos totalmente perdidas, no
encontrábamos apoyo hasta que llegaron Cristina y Cati que nos animaron a
seguir adelante y pelear por nuestros derechos». Una lucha que al final ha
encontrado el camino de la justicia.
Fuente: levante-emv
Foto: Vicent m. Pastor
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