- Con la misma se puso fin a los actos programados en torno al Día Internacional de los Museos
Las piezas a restaurar
han sido dos mazas cerimoniales, de 80
cm de altura en plata y plata dorada al mercurio. Las
mismas se habían oscurecido por la sulfuración de la plata y tenían abolladuras
por golpes como consecuencia del uso y la manipulacoón, así como abrasiones por
rozaduras con otros objetos.
La
limpieza se ha realizado en dos fases: una primera, en seco para eliminar la
suciedad superficial acumulada y el polvo y, otra, físico- química, mediante
disolventes para eliminar la suciedad y antiguos barnices oxidados. Después de
la limpieza, se eliminaron las deformaciones mecánicamente y se procedió a la
soldadura en frío de las roturas y refuerzo del remate superior roto de una de
las mazas. Así como también se aplicó una capa de protección final para evitar
la sulfuración de la plata. Además se realizó un estudio para adecuar los
sistemas de anclajes, renovando los clavos que necesitaban ser sustituidos por
su mal estado para afianzar las mazas.
Las mazas eran el símbolo de autoridad y de
dignidad que utilizaban las ciudades y las villas en los actos públicos. Hay
numerosas referencias históricas, sobre ellas y los maceros, en la
documentación municipal del siglo XVIII, una información que hacía pensar que
esa era su fecha de fabricación, ya que no constaba en ningún registro cuando
fueron realizadas. Si bien, ha sido durante su estancia en el instituto,
después de su estudio y proceso de restauración por parte de los técnicos,
cuando se ha sabido que por su tipología y al comparar sus características con
otras más antiguas, que las mazas son del siglo XVII.
A día de hoy, las mazas son un elemento fundamental y
representativo de los actos más importantes de la Ciudad, ya que se utilizan
para preceder a las autoridades locales, tanto en las principales
celebraciones religiosas, como
procesiones de Viernes Santo y de los Santos
Patronos de Alzira, Virgen del Lluch y Sant Bernat; como en actos civiles, la
constitución de la nueva Corporación Municipal, el acto de proclamación de las
Falleras Mayores de Alzira y el que conmemora la conquista de Alzira por Jaume
I.
Esta pieza de orfebrería única, tanto por su valor
patrimonial como sentimental para Alzira, incrementa la lista de actuaciones de
recuperación de obras de arte que se inició en diciembre de 2012, gracias al
convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Alzira y el Instituto
Valenciano de Conservación y Restauración.
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