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Cualquier espectador con un poco de sentido común intuía el pasado jueves que la aparición estelar de Isabel Pantoja en Telecinco tenía algo detrás. Sencillamente, no era normal que la tonadillera hubiera olvidado tantos años de maltrato por parte de la cadena de Fuencarral. "Bastante 'tomate' me has dado ya", decía a Jorge Javier Vázquez durante la entrevista.
Pues bien, según adelantaba ayer el programa de la Cadena Dial Atrévete, citando a la revista QMD!, la tonadillera habría llegado a un acuerdo con la emisora de Mediaset por la que cobraría una cantidad cercana al millón de euros a cambio de su aparición en varios programas de Cuatro y Telecinco, así como intervenciones de su hijo Kiko Rivera en concursos y magazines del grupo. No obstante, esta primera presencia de la cantante en la cadena fue gratuita, aunque ya estaba acordada en el pacto previo entre Pantoja y la cadena. 

Pero la historia no se queda ahí. Tan sólo un día después de la aparición de Pantoja en Telecinco, el portal Vertele publicaba que la periodista y amiga ínitima de Pantoja, Chelo García Cortés, abandona Antena 3, tras trece años trabajando en la misma, para fichar por la cadena de Vasile. ¿Casualidad? Para nada. Según el mismo programa de radio, la periodista  habría sido la intermediaria que habría llevado a cabo las negociaciones, lo que habría desembocado también su propio fichaje por La fábrica de la tele, productora de Sálvame , Sálvame Deluxe y La noria.

De esta forma, la periodista catalana, una de las tertulianas estrella de DEC, pasará de Antena 3 a Telecinco de la noche a la mañana, para incorporarse al equipo de colaboradores que hasta ahora habían sido sus principales competidores.